Convierte a tus empleados en embajadores con estrategias de capacitación

Convierte a tus empleados en embajadores con estrategias de capacitación

Un programa de formación es más que un proceso educativo pensado en proporcionar los conocimientos y habilidades necesarios a tus colaboradores. Al presentarles nuevas técnicas y habilidades a tus empleados, también estás equipando a tu empresa para el éxito.

Invertir en formación no sólo convierte a tus empleados en expertos en su trabajo, sino que también fomenta su retención dentro de la compañía, esto debido a que están mejor informados y más motivados para progresar en sus carreras. Existe una correlación entre aprendizaje y retención: las empresas que motivan a sus empleados a aprender tienen tasas de compromiso hasta un 50% superiores, según un estudio realizado por la multinacional francesa, Sodexo. 

El compromiso y la retención van de la mano, y la formación debería ser un componente clave de cualquier estrategia de compromiso de los empleados.

Por ello, implementar un plan de aprendizaje y desarrollo sólido puede garantizar que tus trabajadores dispongan de los recursos que necesitan para rendir al máximo y sentir mayor seguridad al realizar sus funciones.

Además, las empresas que no cuentan con planes de capacitación o están poco dispuestas a formar a los nuevos empleados tienen el doble de probabilidades de perderlos. Las posibilidades de que una persona permanezca en su puesto de trabajo actual aumentan considerablemente con las posibilidades de desarrollo que ofrece una organización, por lo que es importante destacar las oportunidades de formación continua durante el proceso de incorporación y así garantizar que los nuevos empleados se sientan apoyados y con ganas de progresar desde el primer día.

 

¿Cómo elaborar un plan de desarrollo de competencias?

El desarrollo de competencias es un área fundamental en el aprendizaje. La creación de buenas competencias permite disponer de un modelo completo de retroalimentación que se puede utilizar para realizar un seguimiento del desarrollo del individuo, comprender y abordar las lagunas de conocimientos. El problema de impartir formación sobre un modelo de competencias una vez elaborado es que a menudo se presenta de maneras demasiado formales que obstaculizan que éste pueda sacar su máximo potencial. 

Una estrategia que sobresale del resto consiste en crear modelos basados en gamificación y hacer de las competencias elementos tangibles como: tablas de clasificación, insignias, puntos y más. Se pueden crear programas completos de gestión de competencias capaces de motivar a otros con experiencias que los empleados disfrutarán. Esto crea un bucle de retroalimentación positiva de recompensa. Cuando se combina con una estrategia de gamificación, tu organización puede utilizar el refuerzo positivo, la competencia amistosa y las recompensas intrínsecas para motivar a los empleados en cada etapa del proceso de empleo.

Antes de brindarte algunas herramientas para tu estrategia de gamificación, vamos a adentrarnos en 8 pasos fundamentales para poner en marcha un plan de desarrollo de competencias repleto del poder de la gamificación.

  1. Identifica los objetivos de aprendizaje frente a los resultados: El primer paso y el más importante, es definir sus objetivos y lo que necesita lograr a través de una estrategia de capacitación gamificada. Los objetivos suelen adoptar forma de metas medibles y cómo se planea alcanzarlas. Una buena práctica es acercarte con expertos que puedan asesorarte y apoyarte con el proceso de un diagnóstico interno, así será más sencillo entender las necesidades que tenga cada área y cada empleado. 
  1. Haz que los comportamientos y habilidades estén alineados a su rol: Estos son los elementos esenciales que necesitan para maximizar la productividad y evitar errores comunes. Entender cuáles son las habilidades de tu equipo, te permitirá desarrollar un plan de carrera adecuado para cada uno. Un plan de desarrollo de competencias eficaz adopta un enfoque holístico de la gestión del talento, teniendo en cuenta sus necesidades psicológicas y la dinámica del equipo.
  1. Habla con tus colaboradores sobre su trayectoria profesional: Puede que ya tengas una idea general de cuál es el lugar de los empleados y cómo crecerán dentro de su organización, pero quizás ellos tienen algo más en mente. Por eso es importante hablar de la trayectoria profesional a nivel individual y recabar información valiosa. Por ejemplo, les gustaría asumir un papel de liderazgo, pero aún necesitan desarrollar competencias clave, como la gestión del tiempo o la planificación estratégica. La trayectoria profesional también ofrece una visión interna de las motivaciones y las aspiraciones profesionales de los empleados. Recuerda que aunque uses estrategias gamificadas, la experiencia y la forma en la que los colaboradores aprovechan cada contenido será individual. 
  1. Crea un plan con incentivos: Un plan de desarrollo de competencias exitoso implica las recompensas adecuadas. Algunas funciones de gamificación contienen un elemento competitivo que permite a los empleados competir entre sí y estrechar lazos mientras aprenden de las áreas vitales de su trabajo. Se trata de hacer que los empleados se sientan parte del equipo. Por ejemplo, puedes hacer concursos o competencias de forma frecuente para mantener actualizados a tus colaboradores sobre los productos y servicios que ofrece tu empresa, y así asegurar sepan las reglas y regulaciones de ellos. Prueba con incentivos pequeños para tareas sencillas y recompensas grandes para otras tareas más demandantes. Estas metodologías buscan que la comunicación se haga más fácil con la ayuda de dinámicas de juego, pues enseña formas para transmitir información, así como cuál es el modo óptimo de transmitirla y cómo hacer que sea eficaz.  Al conectarse con las aplicaciones del lugar de trabajo, la gamificación proporciona a los empleados un feedback rápido sobre su rendimiento y les orienta sobre lo que deben hacer a continuación. También es ideal para incorporar a nuevos empleados. Se puede aumentar el rendimiento siguiendo una serie de acciones que llevarán al empleado a mejorar sus habilidades. 
  1. Desarrolla recursos de apoyo: Las competencias básicas no suelen desarrollarse de la noche a la mañana. Los colaboradores necesitan apoyo continuo para repasar sus habilidades y perfeccionar nuevos talentos relacionados con sus funciones. Puedes incorporar la gamificación en una estrategia de apoyo a la carrera, por ejemplo, les gustaría asumir un papel de liderazgo, pero aún necesitan desarrollar competencias clave como: resolución de problemas, comunicación asertiva o gestión del estrés. La trayectoria profesional también ofrece una visión interna de las motivaciones y las aspiraciones profesionales de los empleados, que puedes utilizar para adaptar la estrategia de gamificación de tu empresa a su contexto actual. Toma en cuenta que las estrategias suelen ajustarse sobre la marcha, no son fijas todo el tiempo.
  1. Establece certificaciones recurrentes: Las certificaciones recurrentes son una de las formas de gamificación de eLearning que más se pasan por alto. Puede que no obtengan la misma gloria que las insignias, los puntos y las tablas de clasificación, pero dan a los colaboradores una inyección de moral. Los trabajadores reciben automáticamente una notificación cuando sus certificados están a punto de caducar para que tengan tiempo de ponerse al día y participar en los cursos pertinentes. Si superan la evaluación final, reciben un certificado imprimible y/o compartible para mostrar sus logros. Mientras tanto, tu organización se asegura de que las habilidades de todos estén al día para evitar infracciones de cumplimiento y mitigar los riesgos en el lugar de trabajo.
  1. Busca la retroalimentación de otros: Los debates sobre la trayectoria profesional son sólo una forma de implicar activamente a los empleados. También debe implicar a los jefes de equipo y a las partes interesadas, que pueden aportar ideas adicionales. Además, es esencial recabar la opinión de los empleados en las distintas fases del proceso de capacitación. Puede ser mediante encuestas y sondeos centrados en tus iniciativas de gamificación. ¿Son relevantes las recompensas? ¿Hay suficiente diversidad de recursos de formación? ¿El trabajo que realizan justifica la recompensa? ¿Apoya su plan de incentivos actual los resultados y comportamientos de rendimiento deseados? Recuerda que este proceso también lo puedes gamificar.
  1. Da seguimiento y evalúa las métricas de tus iniciativas: Aquí es donde entran en juego las sólidas funciones de generación de informes. Descuida, tus métricas saldrán directamente de los objetivos que estableciste. Debes ser capaz de realizar un seguimiento del progreso individual y de equipo para fortalecer la estrategia de gamificación. Por ejemplo, las métricas revelan que sólo el 35% de sus empleados han obtenido las certificaciones o insignias necesarias. O tal vez hay un puñado de empleados que han ascendido en la clasificación mientras que los demás se han quedado rezagados (y probablemente seguirán haciéndolo sin la motivación adecuada). Puedes profundizar en los informes para identificar la causa raíz y ajustar el rumbo.

 

¿Qué herramientas utilizar? 

El mundo de la gamificación tiene muchísimas posibilidades, gracias a su versatilidad, tienes gran cantidad de herramientas y soluciones para crear tu estrategia.

Existen, por ejemplo, cursos y/o talleres ludificados en los que se usan juegos y dinámicas lúdicas como una herramienta de asimilación y refuerzo del aprendizaje teórico. A diferencia del e-learning, son sesiones en vivo ya sea online o presenciales. Recuerda que tienes la opción de ludificar cualquier curso, integrando juegos de rol entre asistentes, usando herramientas gamificadas tipo quizzes, tablas de posiciones y competencia como Kahoot!, con las que los participantes podrán jugar juegos de mesa, cartas y más, a través de experiencias interactivas, vivenciales y lúdicas, que anclarán los conocimientos teóricos de otra forma en su mente. El juego permite simular situaciones "reales" con la ventaja de que nos podemos equivocar y no tendrá consecuencias para el negocio.

 

Uso de videojuegos como herramienta educativa para los trabajadores

¿Sabías que podemos aprender a través de los videojuegos? Las historias de ellos tienen mucho qué contarnos. Metodologías como el edutainment no piensan en premiar o evaluar el aprendizaje, sino que busca llevar la enseñanza a un terreno amigable y divertido a través de juegos de simulación con historias de aventura o preguntas y respuestas que sumergen a los participantes en mundos de fantasía como cualquier videojuego pero con el objetivo del autodescubrimiento, el desarrollo de nuevas habilidades para el equipo como ayudarse entre sí, comunicarse mejor, resolver problemas, tomar decisiones, medir resultados y ejercer liderazgo, todo ello dentro de una atmósfera de confianza que fomenta el compañerismo y la solidaridad.

Un gran ejemplo positivo del alcance que pueden tener los videojuegos es el caso de Carmen Sandiego. Su dinámica era sencilla: un detective encomendado a encontrar a un peligroso criminal. Este debía seguir una serie de pistas para averiguar en qué parte del mundo se encontraba el maleante. Así el jugador viajaba a distintos destinos, hablaba con testigos y recibía reportes con pistas para encontrarlo. Aunque su éxito se debía al hecho de que estaba diseñado para educar a los estudiantes en materia de geografía, seguimos recordándolo gracias a sus personajes divertidos con gran sentido del humor, sus gráficos disparatados que llamaban la atención de los estudiantes y la historia que capturaba a los jugadores. 

¡Si conseguimos atraer la atención de los participantes con historias llamativas y que además les permitan aprender, imagina lo que puedes lograr con la incorporación de tu capital humano!

Existen páginas de recursos gratuitos como Wordwall en las que puedes encontrar juegos con diferentes temáticas y personalizarlos según tus necesidades. También puedes utilizar herramientas como Moodle LMS, que ofrece a los facilitadores o game masters y participantes del juego un gran potencial para impartir y adquirir conocimientos a través de módulos de aprendizaje. Ésta incluye muchas funciones de gamificación como: insignias, tablas de clasificación y cuenta con grandes cantidades de contenido interactivo. 

 

¿Qué beneficios tiene utilizar la gamificación?

La gamificación bien ejecutada fomenta el desarrollo del rendimiento y la productividad en la organización, fideliza a los colaboradores y fomenta que estos hablen bien del espacio de trabajo. 

En el caso de procesos como la incorporación de nuevos empleados hace de la experiencia más fluida y atractiva, dejando de lado esos procesos largos, tediosos y aburridos que no enganchan a la gente. 

Con una buena estrategia de gamificación podrás mantener la atención y el sentido de propiedad de los empleados, quienes a medida que avancen el juego podrán comprender las normas y procesos de la empresa, así como sentirse identificados con ella. 

Sin duda, los programas de formación siguen siendo una poderosa herramienta para el éxito del trabajador en la empresa. Los trabajadores desean incentivos que mejoren su rendimiento, cuando completan su proceso de formación y se sienten bien equipados para desempeñar su rol, son capaces de ayudar a otros en sus procesos de incorporación o buscar soluciones a los problemas del día a día y más.  

En los procesos de incorporación y capacitación, la gamificación facilita la comprensión de la filosofía corporativa, mientras propicia la interacción entre los recién contratados y el resto de la plantilla. ¿Te animas a innovar sus procesos de capacitación? Acércate a MindMaster, somos expertos en crear experiencias lúdicas a la medida de tu empresa, te ayudamos a concretar tus objetivos de capacitación y elegir la solución más adecuada para conseguirlos. 

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